lunes, 5 de octubre de 2015

Azulejos

Tipos:

Azulejos 
cerámicos

Elaborados con

arcilla cocida y

barnizada de

diversos colores:


Adecuados para paredes y suelos, pero en el caso del suelo, asegúrese de que sean lo bastante fuertes. Pueden resultar fríos y resbaladizos al mojarse, pero también son un acabado práctico y bonito para cocinas y cuartos de baño.

Mosaicos Alicatado con motivos elaborados con trocitos de piedra, baldosa o vidrio de colores:

Son coloridos, están muy de moda y resultan un bello acabado para casi todos los lugares, desde una mesa o un salpicadero hasta el cubículo de una ducha o una zona pequeña de suelo. El único aspecto práctico que debe tener en cuenta es que deberá mantener limpia la lechada para que las teselas no se decoloren y se ensucien.

Azulejos de terracota Elaboradas con tierra cocida:

Las hay de muchas formas y tamaños, puede estar hechas a mano o a máquina y su color va del rojo ladrillo al gris piedra. Retienen el calor; por lo que son más cálidas que otras baldosas, pero deben impermeabilizarse, ya que son porosas. Son adecuadas para los suelos de cocinas, especialmente en las casa de campo tradicionales.

Baldosas de  piedra caliza Baldosas de tonos  claros que van del  beige al gris, con la superficie  jaspeada:

Son frescas y elegantes. Se adaptan a interiores tanto tradicionales como contemporáneos y tienen un efecto espectacular en grandes superficies alicatadas. Son porosas y necesitan un tratamiento para que no se manchen.

Baldosas de piedra arenisca Piedra cálida y rojiza:

Son resistentes, no resbalan y quedan muy bien en cocinas y recibidores rústicos. La piedra arenisca es porosa y se mancha con facilidad, pero resulta más económica que la piedra caliza.

Baldosas  de mármol Piedra cara y veteada de color crema a gris:

El mármol es sofisticado, elegante y frío. Queda precioso en el suelo de un gran vestíbulo y puede completarse en los baños con elementos de mármol. Resulta muy resbaladizo cuando está mojado.

Baldosa de pizarra Su color va del azul y el verde intenso al morado y al negro:

La pizarra es más económica que el granito o el mármol, es resistente, no se estropea con el agua y no precisa muchos cuidados, aunque suelen aparecer rayas en las baldosas más oscuras. Queda bien tanto en cocinas tradicionales como contemporáneas. Su color azul grisáceo combina perfectamente con vidrio, cromados y acero inoxidable.

Tobas Alternativa más común para las  baldosas de terracota elaboradas a mano:

Los tonos terrosos son los más habituales (ante, pardo y rojo) y combinan con los colores de las cocinas tradicionales. Son resistentes, no resbalan y resultan muy prácticas para cocinas, aunque con el paso del tiempo pueden aparecer marcas.




Francisco Silván
Arquitecto de Interior
www.arquitecturadeinterior.com
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